domingo, 9 de noviembre de 2008

maldita vaca!!

Un maestro de la sabiduría paseaba por un bosque con su fiel discípulo, cuando vio a lo lejos un sitio de apariencia pobre y decidió hacer una breve visita al lugar. Durante la caminata le comentó al aprendiz sobre la importancia de las visitas, también de conocer personas y las oportunidades de aprendizaje que tenemos de estas experiencias.
Llegando al lugar constató la pobreza del sitio. Los habitantes, una pareja y tres hijos, estaban vestidos con ropas sucias y rasgadas, sin calzado; entonces se aproximó al señor, aparentemente el padre de la familia y le preguntó: “En este lugar no existen señales de trabajo ni puntos de comercio tampoco, ¿Cómo hacen usted y su familia para sobrevivir aquí?”
El señor calmadamente respondió: “Amigo mío, nosotros tenemos una vaquita que nos da varios litros de leche todos los días. Una parte del producto la vendemos o la cambiamos por otros alimentos en la cuidad vecina y con la otra parte producimos queso para nuestro consumo y es asi como vamos sobreviviendo.”

El sabio agradeció la información contempló el lugar por un momento, luego se despidió y se fue. En medio del camino, volteó hacia su fiel discípulo y le ordenó:”Busque la vaquita, llévela al precipicio de allá enfrente y empújela al barranco.”
El joven espantado vio al maestro y le cuestionó. Mas como percibió un silencio absoluto, fue a cumplirla orden. Así que empujó la vaquita por el precipicio y la vio morir. Aquella escena quedó grabada en la memoria de aquel joven durante muchos años.
Un día el joven resolvió abandonar lo que había aprendido y regresar a aquel lugar y contarle todo a la familia, pedir perdón y ayudarlos. Así lo hizo, y a medida que se aproximaba al lugar veía todo muy bonito, con árboles floridos, todo habitado, con carro en el garaje de tremenda casa y algunos niños jugando en el jardín.
Espantado el joven entró corriendo a la casa y confirmó que era la misma familia que visitó hace algunos años con el maestro. Elogió el lugar y le preguntó al señor (el dueño de la vaquita): “¿Cómo hizo para mejorar este lugar y cambiar de vida?”
El señor entusiasmado le respondió: “Nosotros teníamos una vaquita que cayo por el precipicio y murió; de ahí en adelante nos vimos en la necesidad de hacer otras cosas y desarrollar otras habilidades que no sabíamos que teníamos, así alcanzamos el éxito que sus ojos vislumbran ahora.”

que dificil matar la vaca!!!!, pero es parte de los procesos.... que susto!!!!

1 comentario:

Andrés Baeza dijo...

Que buen texto, muy cierto por lo demas, es muy complicado matar la vaca, dejar la "comodidad" para entrar en la insertidumbre, a veces gana el miedo a no poder superarse, yo creo que la mejor manera de superarse es aprender a ver: "Por lo tanto, primero le enseñe a X que era lo que tenian de artificial e inutil las palabras que hilvanaba y que el defecto no era falta de trabajo-lo que es fácuil de corregir- sino un defecto profundo de su manera de ver que es la base de todo y que habia que reeducar no solo su estilo, si no toda su personalidad: inteligencia y vision, antes de escribir" (Lo esencial es invisible a los ojos, reflexiones a partir de "El Principito; Edgardo Sosa)

Eso es lo mas dificil, Aprender a ver!!